Mientras la Unión Europea debate el controvertido paquete legislativo “Ómnibus”, se perfila un cambio preocupante. Las enmiendas propuestas a la Directiva sobre Información Corporativa en materia de Sostenibilidad (CSRD) y a la Directiva sobre Diligencia Debida en Sostenibilidad Corporativa (CSDDD) podrían debilitar las obligaciones ambientales y sociales de las empresas, reducir los requisitos de información y retrasar hitos clave de transparencia para miles de compañías en toda la UE.